¿Cuántas veces has contemplado las facturas mensuales y te has planteado la opción de rebajar tu consumo para la siguiente oportunidad? De utopías también se vive y es que conducir a ciegas solo puede conllevar el hecho de embestir a un muro y que el motor de nuestro carro llore en forma de llamas. Así que en este post, seremos el Lázaro que recupera la vista y el escritor que transforma una distopía en una obra contemporánea.
Un paso hacia delante en el consumo de energía por el medio ambiente
Si tuviéramos tiempo, podría explicarte mil razones por las que una vida sostenible no es una opción, sino el único camino. También podrá afirmar sin que me temblara la voz que tanto a medio como a largo plazo toda esta aventura será beneficioso para tu bolsillo. No obstante, la cuenta atrás ha comenzado, vivimos en la contrarreloj que alcanza los Campos Elíseos y la realidad es que solo nos ciega este eco antropocéntrico que se transforma en un complejo de Dios, que nos impide vislumbrar la realidad.
Cual títere vacío de voluntad, el planeta baila al son de nuestros hilos. Son muchos los que afirman que a esta velocidad 2050 será un año que solo se haya alcanzado en las novelas de ciencia ficción.
Su apariencia lejana esconde la verdad. Está aquí al lado. Muchos gobiernos ya están tomando medidas para arrancar en una batalla que nos tenía que haber unido hace demasiado tiempo. Así que o nos tomamos en serio la amenaza y nos educamos al respecto, o nuestra casa será expropiada por la contaminación.
¿Por qué tienes tienes que moderar el consumo de energía?
La decisión de reducir tu consumo mensual de energía implica regalarle una bocanada de aire fresco a un planeta que padece de un tipo de cáncer de pulmón con todos los tintes de ser terminal.
Lo cierto es que nadie te puede obligar a asumir esta responsabilidad. Somos libres de colaborar y decidir la medida en la que lo hacemos. Aun así, o nos colocamos todos en el mismo bando, o el árbitro señalará fuera de juego antes de que podamos lanzar un contraataque.
Por ello cada pequeño gesto cuenta. Así que te hemos preparado una lista con los tres que más gasto de energía generan y cuyo consumo puedes moderar.
- Lavadoras. Nos reíamos de los estadounidenses cuando tenían que bajar a la lavandería al carecer de este electrodoméstico en casa, y ahora parece que ellos son los que nos llevaban años de ventaja. Su elevado consumo se producirá en cualquier parte, pero si tenemos que pagar y desplazarnos por ello, caeremos mucho menos en la tentación de utilizarlo si no es estrictamente necesario.
- Televisión. Se han convertido en el epicentro de la vida moderna. El lugar de rezo del joven y el mayor. Nunca un objeto en toda nuestra historia ha llamado tanto la atención a tantas generaciones por igual y, pese a que evoluciona, mantiene su posición de dominio en el mismo lugar central de nuestra vida. El problema es que imaginamos que al colocarlo en modo stand by no consume, pero esto es mentira. Tantas horas gastando electricidad lo convierten en uno de los utensilios con un mayor impacto. Acuérdate de apagarlo por completo cuando dejes de verlo.
- Microondas. Su consumo es semejante al de un horno, pero la facilidad y versatilidad que nos ofrece a la hora de cocinar, lo convierten en un utensilio necesario en toda cocina del mundo. Nos ha facilitado mucho la vida, pero parece que también puede ser la hipoteca que no podamos pagar antes de que nos desahucien de nuestro planeta. Hay que tratar de emplear con moderación.
A partir de ahora todo queda en tu mano. ¿Avanzar o rendirse? No hace falta que te repitamos cuál es la única decisión que tiene futuro.